Hoy estuve hablando con una compañera del trabajo y de pronto salió un reportaje por TV de los blogs pro ana y mia; alertaban al mundo de una manera tan cruel, como si fuéramos psicópatas masoquistas.
Y como era de esperarse mi compañera reaccionó diciendo que estamos locas, que no pensamos en nuestra familia, que deberíamos morir solas y no llevarnos a más niñas a la tumba; que somos caprichosas adolescentes jugando a ser perfectas y que el mundo está cansado ya de soportarnos.
Claro, ella no sabe nada de mi mundo, ni de mi estilo; y es que no pueden juzgarnos así, esto no es ningún juego de niñas caprichosas.

Nadie, absolutamente nadie puede entendernos, ni saber lo que sentimos y los motivos que nos llevan a estas extremas medidas, más que nosotras, que ustedes, que lo vivimos en carne propia; ni los médicos, ni psicólogos, ni nadie!... nadie que no lo haya vivido podrá entenderlo por eso por favor no pretendan que dejemos de pensar y vivir esto en un día, es absurdo y peligroso y lo sabemos pero estamos tan cegadas que no podemos dejarlo, se nos hace tan normal, como sólo un sueño o tal vez una pesadilla... y a veces cuando despertamos es ya demasiado tarde.